Panticosa
Panticosa se encuentra en los Pirineos, en la provincia española de Huesca, a una altitud de 1184 metros. La primera vez que esta localidad fue mencionada fue en la confluencia de los ríos Caldarés y Bolática en 1315. Se cree que la zona ya era conocida en tiempos del Imperio Romano debido a sus aguas termales. Aún hoy, el agua brota de la roca con una temperatura que ronda los 60 grados. Este tipo de turismo basado en las aguas termales experimentó un gran auge durante el siglo XIX. Muchos de los edificios de estilo Belle Epoque de aquella época han sido restaurados y aún se conservan hoy en día.
Actualmente, este pequeño municipio cuenta con algo más de 800 habitantes y es conocido sobre todo por ser una estación de esquí diseñada para las familias. El centro deportivo es la propia Panticosa y las termas se encuentran a ocho kilómetros del Balneario de Panticosa. Panticosa presume de tener unas instalaciones para hacer esquí "lo suficientemente pequeñas como para no perderse y lo suficientemente grandes como para poder descubrir una nueva bajada todos los días". Muchos de los telesillas también funcionan en verano, lo que hace de este municipio un destino ideal también para los amantes de la montaña.
¿Qué ofrece Panticosa?
Además de la festividad religiosa del 15 de agosto, existen otras dos fechas muy relevantes en el calendario local: el mercado medieval que se organiza en las calles de Panticosa en julio y el Carnaval, una festividad celebrada de manera muy especial. Durante la semana del Miércoles de ceniza, todos los días tiene lugar una fiesta y los participantes se disfrazan. Esta celebración tiene lugar no solamente en Panticosa, sino que también en las pistas de esquí se pueden máscaras por todas partes.
